Por fin llegaron las fresas asturianas, y vais a tener que perdonarme la foto del corte de la tarta porque la corté todavía congelada, en mi casa cuando gusta algo no esperan a que haga la foto, así que no pude esperar a que quedase más blanda con esta banda de pirañas.
Receta del blog Delish la receta original lleva 24 galletas oreo, pero no somos muy fans, así que usé de chocolate.
- 150 grs. de galletas de chocolate
- 75 grs. de mantequilla derretida
- pizca de sal
mousse
- 2 cucharaditas de gelatina en polvo
- 2 y 1/2 cucharadas de agua fría
- 380 grs. de chips de chocolate con leche
- 3 tazas de nata para montar
- 100 grs. de azúcar glas
- 600 grs. de fresas
cobertura
- 170 c.c. de nata para montar
- 340 grs. de chips de chocolate con leche
Se forra el fondo de un molde desmontable de 20 cm. con papel de horno. Se trituran las galletas y se mezclan con la sal y la mantequilla hasta que estén húmedas. Se cubre el fondo del molde apretando y procurando que quede igualado.
Se lavan las fresas y se les quita el rabito, se secan y vamos colocando mitades alrededor del molde, una vez hecho esto vamos poniendo fresas enteras delante de las mitades con la parte del rabito hacia abajo hasta cubrir el fondo del molde.
En un bol pequeño se pone el agua fría y se echa la gelatina, se espera de 5 a 10 minutos.
En un bol grande echamos los 380 grs. de chips de chocolate. En un cazo se echa una taza de nata y se lleva a ebullición a fuego lento, se retira del fuego y se le añade la gelatina revolviendo hasta que se disuelva. Se añade al chocolate y se revuelve hasta que se derrite. De deja enfriar un poco.
Se baten dos tazas de nata con el azúcar hasta que haga picos fuertes, se echa un cuarto de taza al chocolate y luego vamos echando el resto hasta que esté bien mezclado, se vierte encima de las fresas, se le da unos golpes contra la mesa para que salga el aire y queden los huecos bien cubiertos, se alisa y yo la meto en el congelador en vez de en la nevera para desmoldarla mejor.
Cuando está fría se hierven los 170 c.c. de nata, se echan sobre los chips de chocolate, se dejan 3 minutos y luego se revuelve con un batidor de varillas sin lavantarlo del fondo del bol hasta que se derrita el chocolate, así es más fácil que no salgan burbujas. Se deja enfriar un poco y se cubre la tarta extendiendo el chocolate con una espátula de codo y se mete en el congelador. Se saca del congelador cuando está cuajada la cobertura, se espera 10 minutos y se desmolda, se decora con chocolate rallado y se mete en la nevera hasta que descongele.
madre mía, da igual que aún esté congelada o no, la foto da una idea de lo rica que tiene que estar esta tarta
ResponderEliminar